¿Sabes valorarte? ¿Sabes imponerte? Tal vez respondas sí a estas preguntas, pero puede ser que solo pienses que sí, cuando en realidad no lo estás demostrando en tus acciones y actitudes contigo misma.
Y esto puede verse en algunos comportamientos que tenemos ante ciertas situaciones diarias e incluso en nuestras relaciones personales.
Aquí tienes algunos signos que transmites, incluso de manera inconsciente, que muestran que no te valoras lo suficiente, lo cual puede tener un impacto negativo en tu autoestima y en la forma en que las personas te tratan.
1- No sabes decir no
A veces, nos sentimos tan presionados para hacer ciertas cosas que no sabemos decir no, ya sea por miedo a perder una amistad, miedo a ser rechazada después, entre otros. Sin embargo, es muy importante que tu voluntad prevalezca. Aprende a decir no siempre que no quieras hacer algo. Quien dice sí a todo es percibido como una persona desinteresante y puede ser víctima de abusos.
2- No reconoces tus cualidades
¿Sabes cuando alguien te elogia y tú dices: «imagina, qué va»? Decir eso es lo mismo que decir «esto no es verdad». Por lo tanto, cuando alguien te elogie, acepta el elogio y agradece, a menos que sientas que la persona está siendo falsa o que el elogio está siendo exagerado.
3- Aceptas a cualquier persona para relacionarte
No eres muy selectiva a la hora de involucrarte con alguien y terminas quedándote con la primera persona que aparece, incluso si no es tan buena como te mereces.
4- Te afectan las críticas de los demás
Si te afectan las críticas de los demás, es señal de que no te valoras y crees en todo lo que las personas dicen acerca de ti. Sé consciente de tu valía y no permitirás que comentarios malintencionados te afecten.
5- Tienes miedo de expresar tus opiniones
Evitas expresar tu opinión sobre diversos temas por miedo a ser confrontada y que tus ideas sean consideradas sin valor o incluso tontas.
Estos son algunos signos básicos y a menudo sutiles de que no nos valoramos lo suficiente, pero corregirlos requiere mucho esfuerzo y dedicación. Basta con ejercer el autoconocimiento para poder reconocer lo valiosas que somos.