Un día de estos, estaba viendo un video en YouTube que me pareció de lo más interesante. En el vídeo se enumeraba algunos hábitos que las personas (mentalmente) pobres tienen y que las ricas (mentalmente) no hacen, así que decidí compartirlo aquí con vosotras para reflexionar.
Tenemos hábitos que son verdaderos obstáculos en la vida, y que realmente no hacen la menor diferencia si se eliminan, pero te hará muy bien dejarlos de lado. Y desde mi punto de vista, cuando dice pobre y rico, no se refiere solo a lo financiero, sino mentalmente.
1- Los pobres ven la televisión, los ricos leen libros. ¿Cuánto tiempo se desperdicia viendo programas sin ningún valor educativo, sin siquiera darnos cuenta? Las telenovelas, las noticias del corazón y los programas de televisión en general no tienen nada positivo que añadir a tu vida. Por supuesto, tampoco es necesario ser extremista, pero si quieres progresar en la vida, debes pasar la mayor parte de tu tiempo en cosas que te desarrollen como persona.
2- Los pobres buscan un salario fijo, los ricos buscan resultados y aumentar sus ingresos. A menudo nos conformamos con un salario fijo que nos permita pagar las cuentas y sobrevivir, pero no tenemos el mínimo confort ni estabilidad financiera para hacer lo que realmente queremos, como disfrutar de unas vacaciones en un buen lugar sin pasar apuros después.
3- Los pobres culpan a los demás por lo malo que les sucede, los ricos asumen la responsabilidad por lo que les sucede sea bueno o malo. Reconocer que eres el único responsable de lo que te sucede, ya sea bueno o malo, te da poder de elección y te permite tomar las riendas de tu vida.
Por supuesto, otras personas pueden influir en tu vida, pero la forma en que enfrentas a lo que te sucede es fundamental. Estás donde estás debido a las decisiones que has tomado, y cuando comprendes eso, es mucho más fácil tomar decisiones acertadas.
4- Los pobres «saben» todo, los ricos están siempre aprendiendo. Es un error pensar que ya sabemos todo y que no necesitamos aprender más nada, estamos en constante aprendizaje, por lo tanto, escucha más y habla menos.
5- Los pobres piensan que el dinero es la raíz de todo mal, los ricos ven el dinero como neutro, nosotros somos quienes le damos su destino. Pensar que el dinero es sucio y que es malo tener dinero es una creencia limitante que solo te hace vivir por debajo de lo que realmente podrías. El dinero tiene su importancia, sí, pero no puede ser el centro de tu vida.
Las características mencionadas anteriormente tienen poco que ver con tu condición financiera, sino más bien con tu mentalidad.
