Ser elegante muchas veces tiene poco o nada que ver con el dinero; a veces solo necesitamos pulir algunas áreas de nuestra vida para ser más elegantes.
Por supuesto, el dinero puede ayudar, y mucho, en la apariencia, como comprar ropa de mayor calidad, someterse a algunos tratamientos estéticos, tener un cabello impecable, etc.
Pero mucho de esto podemos cuidar en casa, incluso con poco dinero. Sin embargo, la verdadera elegancia proviene de adentro, de la forma en que te comportas ante el mundo y la imagen que transmites; todo esto se puede pulir gastando poco o ningún dinero.
Observa dónde y qué puedes mejorar en ti misma para convertirte en una mujer más elegante y refinada. Recuerda que se necesita esfuerzo y dedicación.
1. Practica la etiqueta
Conocer las reglas de etiqueta es fundamental para saber comportarte en diversas situaciones y lugares. Sé una persona educada y amable con todos, no des tu opinión si no te la piden, evita ser invasiva en las preguntas y también evita las habladurías.
2. Buena comunicación
Saber expresarte es muy importante en la convivencia social. Exprésate de manera que te hagas entender, utiliza un tono de voz adecuado, ni muy bajo ni muy alto. Evita gritar y perder el control, y aprende a actuar ante provocaciones.
3. Ten un buen carácter
Afina tu carácter, sé una persona bondadosa, empática, amable y educada. Desarrolla virtudes y mantén valores innegociables.
4. Ten contenido
¿Con qué alimentas tu mente? Lo que ves y consumes puede ayudarte a ser una persona mejor o peor. Opta por consumir buenos contenidos; después de todo, eres moldeada por lo que consumes. Por eso es importante ver buenas películas, visitar museos y lugares que te aporten algún valor o conocimiento, también para que tengas repertorio para conversaciones.
5. Cuídate a ti misma
Practica actividades físicas, cuida de tu apariencia, cabello, uñas y dientes.
6. Ten una rutina
Crea una rutina que te ayude a desarrollarte día tras día. Sé consciente de lo que debe hacerse durante tu día.
7. Cuida tu entorno
Mantén tu casa, tu habitación, bien organizados. Cuida tu entorno y mantenlo siempre limpio y ordenado.